Hachiko: La emotiva historia detrás del perro que conquistó al cine
Algunas películas trascienden la pantalla y logran un lugar especial en el corazón del público. Una de ellas es “Hachiko: Siempre a tu lado”, el drama de 2009 dirigido por Lasse Hallström que relata una conmovedora historia de amistad y lealtad entre un hombre y su perro. Protagonizada por Richard Gere y el inolvidable Hachiko, esta cinta no solo emocionó a millones, sino que también reavivó el interés por la increíble historia real que la inspiró.
La trama de la película, basada en hechos reales, presenta a Parker Wilson, un profesor universitario interpretado por Gere, quien encuentra un perro de raza Akita en una estación de tren y decide adoptarlo. Así nace una entrañable relación que muestra la inquebrantable lealtad de Hachiko, quien cada día espera a su dueño en la estación. Sin embargo, el destino da un giro trágico cuando Parker fallece inesperadamente, dejando al fiel perro esperando durante años el regreso de su amado amigo.
En la vida real, la historia ocurrió en Japón durante los años 20. El verdadero Hachiko nació en 1923 y perteneció al profesor Hidesaburō Ueno. Tras la muerte del académico en 1925, el perro continuó visitando la estación de Shibuya durante casi una década, convirtiéndose en un símbolo nacional de lealtad y amor incondicional. Esta conmovedora relación llevó a que se erigiera una estatua de bronce en su honor, que aún hoy se encuentra en Shibuya, donde cada año se conmemora su memoria.
En la película, la representación de Hachiko no estuvo a cargo de un solo perro, sino de tres: Chico, Layla y Forrest. Cada uno de ellos aportó habilidades específicas para las escenas. Chico y Layla eran hermanos y se alternaron en las secuencias más enérgicas, mientras que Forrest interpretó a Hachiko en sus últimos años. Según Richard Gere, trabajar con ellos fue un desafío, ya que los perros Akita son conocidos por su independencia. Sin embargo, el vínculo que desarrolló con los animales durante el rodaje resultó tan auténtico que traspasó la pantalla.
Tras el éxito de la cinta, los perros que dieron vida a Hachiko continuaron con sus vidas lejos de los reflectores. Aunque todos han fallecido, dejaron un legado imborrable. Forrest, quien falleció en 2017, fue especialmente recordado por su dueño, quien describió la profunda conexión que compartieron. Chico, considerado el más travieso durante las grabaciones, murió en 2018, poco después de su hermana Layla.