Jésica Cirio habló tras un año marcado por la tragedia y las polémicas judiciales
La vida de Jésica Cirio atraviesa uno de los momentos más complejos de su trayectoria personal y profesional. En los últimos meses, la modelo y conductora se vio envuelta en una serie de situaciones que conmovieron a la opinión pública y que impactaron de lleno en su intimidad. Finalmente, decidió romper el silencio y expresar cómo transita este presente que combina dolor personal y exposición mediática.
Fue a través de la pantalla de Canal Trece, en el programa “Mujeres Argentinas” conducido por María Belén Ludueña, donde se conocieron los mensajes que Cirio compartió para referirse tanto a la pérdida de su hermana como a las causas judiciales que involucran a su expareja, Elías Piccirillo. La conductora del ciclo explicó que había mantenido un contacto directo con la modelo y que ese intercambio daba cuenta del complejo escenario en el que se encuentra.
Uno de los temas que más conmovió fue la noticia de la muerte de Verónica Mestre, hermana de Cirio, ocurrida meses atrás pero que salió a la luz recientemente. La presentadora sostuvo que ese hecho marcó un antes y un después en la vida de la conductora, sumando un fuerte golpe emocional en medio de los conflictos judiciales que ya estaban en curso. Según relató Ludueña, Cirio le confió que se encontraba todavía en proceso de asimilar la pérdida y que prefiere transitarlo de manera reservada, apoyándose en su círculo íntimo.
En paralelo, la situación de Elías Piccirillo, su exmarido, también ocupa un lugar central en las repercusiones mediáticas. El empresario fue detenido recientemente en el marco de una investigación judicial, lo que generó especulaciones sobre un posible vínculo de Cirio con el caso. Sin embargo, ella fue tajante al respecto: “Yo no estoy imputada en la causa. Lo de Elías es muy difícil. Estoy tratando de sobrellevar mi vida con la situación”, expresó con firmeza.
Con estas palabras, Cirio buscó dejar en claro que, aunque la causa genera un fuerte revuelo, ella no se encuentra involucrada directamente en las investigaciones. Además, aclaró que su relación con Piccirillo lleva tiempo rota: “Si bien ya hace un tiempo estamos separados, es todo muy difícil. Estoy apoyándome en mi familia. Son muchas cosas juntas este año”, agregó, evidenciando el peso emocional de estos meses.
La figura televisiva, que hasta hace poco fue una de las caras más visibles de La Peña de Morfi, ha preferido mantener un bajo perfil desde que se intensificaron las polémicas. Su salida del programa también coincidió con el inicio de estas turbulencias en su vida privada, lo que alimentó especulaciones en torno a sus decisiones profesionales.
A lo largo de su carrera, Cirio ha sabido construir una imagen vinculada al espectáculo y a la conducción televisiva, pero hoy enfrenta un momento en el que lo personal ocupa el centro de la escena. El recuerdo de su hermana, el proceso judicial de su exmarido y los cambios en su vida laboral conforman un panorama que ella misma define como “muy difícil de sobrellevar”.
Aun así, la modelo dejó entrever que busca fortaleza en los afectos más cercanos, especialmente en su familia, para atravesar este proceso. Su testimonio refleja la vulnerabilidad de alguien que, acostumbrada a estar bajo las luces de la televisión, hoy intenta priorizar su bienestar emocional y el de su entorno más próximo.
Con sus declaraciones, Jésica Cirio no solo rompió el silencio, sino que también envió un mensaje claro: está enfocada en reconstruir su vida en medio de un escenario adverso, sin dejar que la exposición mediática la arrastre por completo. Aunque el camino se presenta lleno de obstáculos, su voz en primera persona buscó poner fin a rumores y dejar en claro cuál es su verdadera situación.