Roña Castro recordó la secuela previa de la “Locomotora” Oliveras y su última charla antes del ACV

La noticia del fallecimiento de Alejandra “Locomotora” Oliveras conmocionó al mundo del deporte argentino. La exboxeadora, reconocida por su actitud aguerrida dentro y fuera del ring, perdió la vida este lunes tras sufrir un ACV isquémico el pasado 14 de julio. En medio del dolor que atraviesa la comunidad del boxeo, el ex campeón mundial Jorge “Roña” Castro compartió sus recuerdos y reflexiones sobre su colega y amiga.

Durante una entrevista televisiva, Castro reveló que, según su perspectiva, Oliveras ya había presentado síntomas neurológicos una década atrás. “Para mí, ya venía con una secuela. Hace 10 años le había pasado algo parecido. Le quedó la boca medio cruzada”, comentó al aire en el programa de Karina Mazzocco por América TV. Aunque en ese momento el periodista Daniel Fava aclaró que lo ocurrido no había sido un ACV sino una parálisis facial, el “Roña” insistió en que esa afección podría haber sido una señal de advertencia.

Este testimonio abrió el debate sobre los efectos duraderos del deporte de contacto y la necesidad de realizar controles médicos periódicos. “Los golpes te dejan huellas, y cuando pasás los 40, el cuerpo te pasa factura”, agregó Castro, subrayando la importancia de cuidar la salud una vez terminada la carrera profesional.

Además del recuerdo médico, el exboxeador también compartió la última conversación que tuvo con Oliveras días antes del trágico episodio. Ambos habían participado recientemente en la grabación del programa Pasapalabra, que se emitió como homenaje póstumo a la deportista. “Hace dos semanas compartimos una jornada de grabación. Charlamos, nos reímos… Era una mina fuerte, con garra. Siempre positiva, siempre con una palabra de aliento”, relató Castro con visible emoción.

En ese mismo espacio, recordó el vínculo especial que los unía más allá del ring. Ambos habían sido apodados “Locomotora”, un nombre que describe a la perfección el estilo combativo de cada uno. “A mí me decían así desde los 17, porque nunca retrocedía en el cuadrilátero. Y ella era igual. Iba siempre al frente, con decisión. Yo no tenía problema con que usara el mismo apodo, porque era como una versión femenina mía. La admiraba mucho”, expresó.

La figura de Oliveras había trascendido el ámbito deportivo. Con una personalidad carismática y una historia de superación constante, logró convertirse en un símbolo de fortaleza para muchos. Su carrera, marcada por títulos y triunfos, también estuvo acompañada por una fuerte presencia en medios y eventos públicos.

La partida de Alejandra “Locomotora” Oliveras deja un vacío en el deporte argentino, pero también un legado de determinación, coraje y pasión. Sus colegas, como el “Roña” Castro, la despiden con palabras sinceras y recuerdos imborrables. En medio del duelo, sus testimonios refuerzan un mensaje claro: más allá del éxito, la salud no debe descuidarse, y el paso del tiempo exige una atención especial para quienes han dedicado su vida al deporte de alto rendimiento.

Mientras la comunidad deportiva rinde homenaje a una de sus grandes referentes, el relato de Jorge Castro ayuda a comprender no solo el impacto de su pérdida, sino también la importancia de reflexionar sobre el cuidado físico y emocional después de una carrera intensa.